Aliyev amenaza con una nueva guerra
.A días de conmemorarse un nuevo aniversario del genocidio de 1915, el Presidente de Azerbaiyán volvió a atacar al pueblo armenio: "Cuando algunas fuerzas revanchistas se levanten en Armenia, deben saber que, si es necesario, sus cabezas serán aplastadas en cualquier momento".
Redacción NOR SEVAN
En vísperas de un nuevo aniversario del 24 de abril, el presidente azerbaiyano Ilham Aliyev volvió a atacar al pueblo armenio. Pasaron casi seis meses del fin de la guerra en la región de Artsaj, pero el líder autoritario no detiene su discurso xenófobo, belicista y fascista. El pasado 20 de abril en diálogo con AZTV, amenazó con volver a invadir Armenia para poder concretar el corredor de Zanguezur que conectaría a Azerbaiyán con Najichevan.
"Si quiere Armenia lo solucionaremos fácil y si no, lo resolveremos por la fuerza", enfatizó Aliyev sobre la implementación de este corredor que "responde a sus intereses nacionales". "Como dije antes y durante la guerra, o renuncian voluntariamente a nuestra tierra o los desalojaremos por la fuerza. Y el destino del corredor será el mismo", exclamó y agregó: "El pueblo de Azerbaiyán regresará a Zangezur, que nos fue arrebatado hace 101 años".
Siguiendo con su discurso de guerra, Aliyev acusó a Armenia de haber destruido todo en las regiones de Karabaj. "Si lo comparamos con la Segunda Guerra Mundial, en ese momento no se permitían tales atrocidades, los monumentos religiosos no fueron destruidos", aseveró el mandatario azerí. Pero no recordó que durante el conflicto de los cuarenta días, el Ejército azerí dirigido por las cúpulas militares turcas, en alianza militar con el Estado genocida de Israel y junto mercenarios terrorista, atacó un sinfines de asentamientos pacíficos, patrimonios culturales y religiosos del pueblo armenio.
Asimismo, el Presidente de Azerbaiyán aseguró que si es necesario, irán a nueva guerra por los territorios. "Cuando algunas fuerzas revanchistas se levanten en Armenia, deben saber que sus cabezas serán aplastadas en cualquier momento si es necesario", manifestó. "Si identificamos una posible amenaza, la destruiremos de inmediato. Todo el mundo debería saber esto, tanto Armenia como sus seguidores", dijo el autoritario Aliyev.
La respuesta de Armenia no tardó en llegar. El defensor de los Derechos Humanos de Armenia Arman Tatoyan expresó que el Ilham Aliyev amenazó a toda la población armenia con una nueva guerra. Además, señaló que el mandatario azerí, en sus discursos del 12 y 13 de abril, declaró abiertamente contra la gente que vive en Armenia y Artsaj.
"La entrevista del 20 de abril del presidente de Azerbaiyán es una prueba de su política genocida, que contiene intimidación y que está estrictamente prohibida por el derecho internacional", denunció el ombudsman. Resaltó que distorsiona los hechos históricos y que sus declaraciones evidencian sus políticas fascistas.
"Es obvio que de esta manera el presidente de Azerbaiyán desarrolla el odio étnico al más alto nivel estatal, es decir, el odio a los armenios y lleva a cabo propaganda pública de hostilidad", subrayó el Defensor del Pueblo armenio.
Cabe destacar que la Defensoría de los Derechos Humanos realizó una investigación donde confirmó que Azerbaiyán realizó decapitaciones, torturas y otros crímenes de guerra contra civiles y militares durante y después de la guerra.
Ante esta situación, Arman Tatoyan llamó a las organizaciones internacionales a repudiar las declaraciones genocidas y fascistas de Aliyev. "Deben tener en cuenta que su silencio contribuyó a las increíbles violaciones a los derechos humanos durante la guerra. Por eso, el Presidente de Azerbaiyán hace declaraciones absolutamente agresivas que socavan los fundamentos del derecho internacional", exclamó.
Por último, "es necesario prevenir la política genocida y fascista de Azerbaiyán, la propaganda estatal del odio y la enemistad de los armenios con medios decisivos y orientados a resultados reales, para excluir nuevas violaciones de derechos, nuevos crímenes de guerra en el futuro", finalizó el Defensor del Pueblo.
Desde Cancillería declararon que las palabras del mandatario azerí van contra "la paz y la estabilidad regional". Aseguraron que esta es otra evidencia de que son falsos los proyectores de paz y de reconciliación que expresan las autoridades de Azerbaiyán.
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