Aliyev y la reforma de la Constitución Armenia

El presidente azerbaiyano insiste en que si el país vecino no cambia su Carta Magna no habrá firma de acuerdo paz.

Redacción NOR SEVAN

Varios sitios de noticias internacionales escriben que la insistencia de Azerbaiyán para que Armenia introduzca cambios en su Constitución "para fortalecer el tratado de paz entre ambos Estados", se debe a que Bakú quiere estar seguro de que los documentos firmados no serán cancelados por un hipotético nuevo gobierno de Ereván.

"Las negociaciones no van muy bien para la parte armenia, lo que, sin embargo, parece beneficiar a los actuales dirigentes de Armenia y a sus aliados en Occidente, ya que estos últimos ven al Ereván débil como un bocado sabroso y un punto atractivo desde donde difundir su influencia en la región. Y para conseguir este objetivo, Occidente está tomando medidas activas para tensar las relaciones entre Armenia y Rusia, debilitar a Ereván en la región y utilizarlo en su beneficio”, escribe el Canal Rybar de Telegram, dedicado a difundir noticias y análisis internacionales.

Aliyev quiere legitimar la ocupación de Artsaj

El analista político y sociólogo armenio Stepán Hasan Chalalian, afirmó que la insistencia de Bakú para cambiar “el preámbulo de la Constitución de Armenia en la que hay una referencia a la Declaración de Independencia donde se menciona la reunificación de Nagorno Karabaj y Armenia del 1 de diciembre de 1989, aprobada por el Soviet de Diputados Populares de la Región Autónoma de Nagorno Karabaj y por el Soviet Supremo de la Armenia Soviética”, no sólo se debe a que Azerbaiyán ve aquí un peligro futuro si llega a haber un cambio de gobierno en Ereván, sino también a que “intenta legitimar de jure la ocupación de Artsaj”.

“El problema es que las autoridades actuales de Armenia también hablan sobre la cuestión de la reforma de la Constitución”, alertó Chalalian.

El politólogo agregó que la “propuesta” de Aliyev a Pashinian para presentar una solicitud conjunta para disolver el Grupo de Minsk de la OSCE, va en el mismo sentido, ya que “quiere deshacerse de la única organización internacional que se ocupa de la cuestión de Artsaj”.