Se reunieron en Moscú los cancilleres de las repúblicas de la exsoviéticas

Se aprobaron varios documentos conjuntos, pero Armenia decidió no adherir a dos de ellos.

Redacción NOR SEVAN

Ayer, lunes 7 de octubre, en Moscú, antes de la reunión de los Jefes de Estado de los países de la Comunidad de Estados Independientes (CEI, ex Unión Soviética), se llevó a cabo la sesión del Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de los Estados miembros de la CEI, de la que participó el Canciller armenio Ararat Mirzoyan.

En el marco de la sesión, se llevaron a cabo reuniones cerradas y ampliadas en las que se discutieron los temas del orden del día de las actividades de la CEI. Entre los documentos aprobados está también el de la decisión de conceder a la ciudad de Meghri el estatus honorífico de "Capital cultural de la CEI" en 2026, destacando el patrimonio cultural que posee la ciudad desde tiempos remotos. También se trató y acordó sobre la celebración conjunta, el próximo año, del 80° aniversario de la Victoria en la Gran Guerra Patria. El Ministro Mirzoyan subrayó la importante contribución del pueblo armenio en la lucha contra el fascismo, la discriminación racial y la intolerancia.

En la reunión se discutieron cuestiones relacionadas con la estabilidad y la seguridad regionales. Ararat Mirzoyan habló sobre los principales acontecimientos del último período con respecto a las negociaciones para restablecer las relaciones entre Armenia y Azerbaiyán, en particular, dio detalles sobre la posibilidad de firmar un tratado de paz.

Los Ministros de Asuntos Exteriores de la CEI adoptaron una declaración sobre la seguridad en Eurasia, destacando la importancia de preservar el sistema de derecho internacional en la región. En el documento se señala que los países de la CEI son conscientes de la importancia de mantener y proteger el sistema de derecho internacional -basado en la Carta de la ONU- para garantizar la estabilidad en el territorio de Eurasia. También se subraya la necesidad de consolidación de la comunidad internacional para encontrar respuestas colectivas a los desafíos y amenazas a la seguridad globales y regionales.

Además, los jefes de Asuntos Exteriores de la CEI condenaron enérgicamente cualquier intento que tenga como objetivo perturbar los procesos de integración y cooperación equitativa en Eurasia, comprometiéndose a realizar los esfuerzos necesarios para equilibrar los intereses, buscar soluciones y compromisos que ayuden a prevenir conflictos y a mantener la estabilidad en la región.

Sin embargo, y dejando una vez más en claro que el actual gobierno de Ereván cumple el rol de títere de Occidente, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia informó que no adhirió a las declaraciones sobre los "Principios de garantía de la seguridad en Eurasia" y "La inadmisibilidad de medidas unilaterales en las relaciones internacionales".

Según Antranik Tevanian, líder del Movimiento Madre Armenia, "esto indica que Nikol Pashinian está siguiendo constantemente un camino hacia la ruptura de relaciones con Rusia y convirtiendo a Armenia en un instrumento anti-ruso en manos de Occidente, mientras al mismo tiempo se aferra a los colosales beneficios económicos de las relaciones con Rusia y la UEEA (Unión Económica Euroasiática)".