"El Tigrán de Hierro", noveno campeón mundial de ajedrez
Durante más de dos décadas, el gran maestro internacional de ajedrez, el armenio soviético Tigrán Petrosian, se mantuvo en la cumbre del juego ciencia.
Redacción NOR SEVAN
Tigrán Petrosian se convirtió en el noveno campeón mundial de ajedrez en 1963 al derrotar a Mikhail Botvinnik en un partido altamente estratégico celebrado en Moscú, Unión Soviética, del 23 de marzo al 20 de mayo de 1963.
Reconocido por su impenetrable estilo defensivo y su excepcional comprensión posicional, Petrosian aseguró la victoria con una puntuación de 12.5 a 9.5. Este triunfo puso fin a la era de dominio de Botvinnik y estableció a Petrosian como un formidable campeón.
Petrosian defendió con éxito su título en 1966, consolidando aún más su legado como uno de los campeones más fuertes y consistentes en la historia del ajedrez. Su reinado como campeón del mundo duró hasta 1969, cuando fue derrotado por Bobby Fischer.
Legado
A Tigran Petrosian, un gran maestro de ajedrez armenio soviético apodado "El Tigrán de Hierro", se lo recuerda -y celebra- por sus habilidades defensivas sin igual, su profundo pensamiento profiláctico e ingenio estratégico. Su estilo priorizaba la prevención de los planes de sus oponentes antes de que pudieran materializarse, convirtiéndolo en uno de los jugadores más difíciles de derrotar.
Además de su éxito en el Campeonato Mundial, Petrosian fue cuatro veces campeón soviético y un jugador clave en los legendarios equipos de las Olimpiadas de ajedrez de la Unión Soviética, ya que fue fundamental en nueve equipos ganadores de la medalla de oro, demostrando constantemente excelencia en la escena mundial.
Las contribuciones de Petrosian al ajedrez y su enfoque único al juego, siguen inspirando a generaciones de jugadores que valoran la paciencia y el dominio posicional.
Comments