¿Occidente prepara a Armenia para la paz o para la guerra?
Mientras se muestran como mediadores proponiendo reuniones y encuentros entre funcionarios armenios y azerbaiyanos, Washington y Bruselas continúan azuzando las diferencias en ambos pueblos, utilizando retóricas agresivas y vendiendo armas.
Redacción NOR SEVAN
Durante su reciente visita oficial a Armenia, que tuvo lugar a principios de octubre, la ministra de Exteriores de Francia, Catherine Colonna, declaró oficialmente que su país había acordado la firma de contratos, que permitirán la entrega de equipamiento militar para que Ereván pueda asegurar su defensa.
Con el argumento falso de que “Rusia abandonó a Armenia”, Pashinian avanzó decididamente, durante los últimos dos años, en la concreción del principal objetivo que lo llevó al poder de la mano de Occidente: sacar a Rusia de la región y repartir allí zonas de influencia entre Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Turquía, el sionismo y la OTAN. Algo muy parecido a la situación en la quedó atrapada El Líbano desde hace décadas, sumiéndola en sucesivas tragedias y en la destrucción del país y la sociedad.
Como siempre hizo Occidente, a lo largo de estos años manifestó "enérgicamente", y en repetidas ocasiones, su compromiso con la seguridad de Armenia y con la de los habitantes de Nagorno Karabaj. Pero lo hizo solo de palabra o a través de declaraciones y resoluciones, que solo crearon la sensación de apoyo y nada más. Pero eso le sirvió al gobierno para justificar los sucesivos pasos que dio y viene dando en esa dirección.
Todo esto sucede mientras Rusia sigue siendo parte de la región -porque está allí, sus límites llegan hasta el Caúcaso-, Armenia continúa enfrentándola cual si fuera una potencia que está dirimiendo el control planetario con Moscú, y los países que “auspician” y “apoyan” esta política armenia, sólo hacen declaraciones rimbombantes y se mantienen a miles de kilómetros del territorio soberano de Armenia, donde permanecen los miembros de las Fuerzas Armadas de Rusia, custodiando las fronteras con Turquía, Irán y Azerbaiyán.
El gobierno de Pashinian, que puso en crisis y sigue debilitando el complejo defensivo que garantizó hasta ahora la seguridad de Armenia, avanza en la firma de un acuerdo de paz con Azerbaiyán y en la apertura de la frontera con Turquía, con la ingenua convicción que ante la salida de Rusia, Occidente vendrá corriendo a proteger a sus “queridos armenios” y a enfrentarse con Turquía y Azerbaiyán, ambos aliados de la Unión Europea, socios de Gran Bretaña y Estados Unidos, y amigos de Israel.
Ahora, según información oficial, Francia enviará a Armenia sistemas de defensa aérea Mistral y radares Ground Master 200, además de haber cerrado contratos para la formación militar y asesoría a cargo de oficiales franceses. También enviará varias unidades del vehículo blindado de transporte de tropas Bastion, Por otra parte, el fin de semana pasado, en Londres, se firmó el sexto capítulo de la cooperación en defensa entre Armenia y Gran Bretaña.
El portavoz del Ministerio de Exteriores azerbaiyano, Ayhan Hachizade, reaccionó al envío de armas francesas a Ereván, declarando que “Armenia y Francia deben poner fin a su política armamentista en la región y entender que no hay otra opción que la paz y colaboración”. Según el funcionario azerbaiyano, este paso de Francia tensará la situación en la región.
Claro que esta declaración pierde sentido cuando viene del miembro del gobierno de un país que hizo y hace del uso y de la demostración de su poderío militar, la principal arma en política exterior.
Desde Moscú, el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, sostuvo que “Armenia es un país soberano que desarrolla relaciones bilaterales con los Estados que considera oportunos. Tenemos nuestras relaciones con Armenia. No tengan dudas que Armenia es un país amigo, es nuestro aliado y seguiremos desarrollando nuestras relaciones estratégicas”.
La representante oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, habló de las debilidades de los vehículos blindados Bastión y enfatizó que “lamentablemente, Occidente está engañando al pueblo de Armenia una vez más”. La funcionaria rusa dejó en claro que “la compra de equipos militares producidos en diferentes países nunca ha ayudado a aumentar la capacidad de defensa de nadie”.
La agencia estatal armenia Armenpress, citando un documento interno del Senado francés, informó, a principios de esta semana, que Francia suministrará a Armenia un total de 50 vehículos blindados Bastion, producidos por Arquus, y también considerará la posibilidad de celebrar un contrato para el suministro de sistemas de artillería César.
Medios franceses como el diario Le Figaro se hacen eco de un reporte del Senado de Francia de finales de noviembre, donde señala la entrega en curso de los primeros 24 equipos, mientras otros 26 están en producción. El texto parlamentario, relacionado con el proyecto de ley del presupuesto 2024, también menciona la demanda de venta por Ereván de tres radares GM200 y cita la solicitud de misiles tierra-aire Mistral 3.
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