Pashinian: de la "lógica contradictoria" de la Independencia al "acuerdo estratégico" con Azerbaiyán

El primer ministro armenio Nikol Pashinian concedió una entrevista a la Televisión Pública de Armenia y habló sobre todos los temas que preocupan a la sociedad y a la armenidad.

Redacción NOR SEVAN

El pasado viernes 22 de noviembre de 2024, el primer ministro de la República de Armenia, Nikol Pashinian, fue entrevistado en exclusiva por el principal medio de comunicación del país: la TV Pública (Canal 1).

Durante el reportaje, Pashinian respondió las preguntas realizadas por la periodistas e hizo referencia a los temas que más preocupan a los habitantes de la República y también a los miembros de las comunidades armenias asentadas en distintos países de los cinco continentes.

A continuación, presentamos algunas de las ideas y de los conceptos volcados por el jefe del gobierno armenio.

Pashinian y "la lógica contradictoria" de la Declaración de Independencia

"Incorporamos en la Declaración de Independencia una lógica que presupone conflictos prolongados y profundos en nuestro medio ambiente", afirmó el primer ministro armenio Nikol Pashinian en la entrevista concedida a la TV Pública la PTA. Según él -en una apreciación muy particular-, la redacción parecería afirmar que la República de Armenia no podría existir.

“Esta larga y profunda lógica de conflicto con nuestro entorno nos lleva a pensar lo siguiente: debido a estos conflictos, Armenia no podría existir, porque imagínense, estamos creando un nuevo Estado independiente y estableciendo una lógica de conflicto con nuestros vecinos Azerbaiyán y Turquía.

La otra lógica que surge es la siguiente: teniendo tales relaciones en nuestro entorno, ¿cómo deberíamos sobrevivir en él y en estas condiciones? Para ello necesitamos un superprotector, no hay otra salida”, reflexionó Pashinian, según esta mirada 'particular'.

A continuación, y casi que justificando en sociedad su anti-rusismo, continuó diciendo que "ese superprotector, cuyo puño es más grande y que supuestamente nos respalda, ocupa así nuestro lugar para todos y en todas las circunstancias".

"Y ahora aquí viene la otra realidad. Agitará tanto el puño que los demás le tendrán miedo, se pondrán de acuerdo con él para que no agite más ese puño. Y también agitará el puño para decirnos a nosotros que seamos inteligentes, que veamos cómo los demás acordaron con él y que si nosotros no lo hacemos esos golpes de puño se volverán contra nosotros. Eso es lo que pasó", dijo Pashinian con ironía, pero sin demostrar con pruebas fehacientes y concretas lo que estaba afirmando desde su perversidad y con un juego de palabras cargado de hipocresía.

Parecería ser que para Pashinian también esa 'lógica contradictoria' en la Declaración de la Independencia de la República de Armenia 'fue culpa de los rusos'.

Cuando se le preguntó si se estaba dirigiendo a la sociedad con una propuesta para realizar reformas constitucionales y eliminar de la Constitución la referencia a la Declaración de Independencia, Pashinian dijo: "No relacionemos esas cuestiones entre sí, porque nuestro Tribunal Constitucional ya ha dicho que nuestra Declaración de Independencia tiene fuerza legal de jure sólo en aquellas partes que están literalmente expresadas en la Constitución. Ninguna de las partes que mencioné está expresada literalmente en la Constitución".

El primer ministro no dudó en opinar también sobre otro tema urticante y lo hizo con ideas que despertaron una catarata de repudios. Pashinian señaló que "así como nosotros nos enojamos cuando escuchamos hablar de 'Azerbaiyán Occidental', hay otros que se enojan cuando hablamos de 'Armenia Occidental'. Seguramente dirán que esta es una nueva traición. Pero mi responsabilidad es reflexionar sobre estos temas y no permitir que sigamos yendo hacia la destrucción de nuestro Estados".

Armenia y la Unión Europea

Al primer ministro de Armenia siempre le gustó la idea de sentirse parte de Occidente, más allá de que la milenaria historia y la realidad armenia demuestren lo contrario. Por eso, ni bien logró hacerse cargo del gobierno luego del golpe de Estado institucional de mayo de 2018 -que contó con el apoyo de Washington, Bruselas, Bakú, Ankara y Tel Aviv-, pasó a la ofensiva con el proyecto elaborado por sus "nuevos aliados".

Con una Armenia cada vez más débil, aislada y a merced de las exigencias de quienes no ocultan en absoluto querer terminar lo iniciado en 1915, Nikol Pashinian no cede en su antipatriótica avanzada pro-occidental. Ahora, luego de varias medidas tomadas en estos seis años, llegó el turno de "consultarle al pueblo" si quiere formar parte de la Unión Europea, como si la UE está con los brazos abiertos esperando la llegada de Armenia.

"Varios partidos políticos y organizaciones no gubernamentales han recogido firmas para el tratamiento legislativo del proceso de adhesión de Armenia a la Unión Europea. Consiguieron 60 mil firmas en lugar de las 50 mil requeridas y el tema pronto se presentará al parlamento para su discusión", dijo Pashinian a modo de intentar demostrar que es el pueblo quien quiere unirse a Europa.

Lo que no explicó Pashinian es por qué sus diputados rechazaron la propuesta presentada por el Movimiento Hayakvé, que recolectó también 60 mil firmas para el tratamiento del proyecto de ley que proponía criminalizar el reconocimiento de Nagorno Karabaj como parte de cualquier otro Estado, en nombre de Armenia.

Los recientes cambios en el gabinete

Al ser consultado sobre los recientes cambios en el gabinete, luego de las renuncias/despido de varios funcionarios, Pashinian afirmó estos cambios de personal no están relacionados con conflictos en la naturaleza de las personas, sino con el trabajo realizado, destacando que "esta fue una decisión personal, porque el primer ministro goza de sus poderes".

El jefe del gobierno de Armenia dijo que siempre mantiene discusiones con sus compañeros sobre muchos temas y, en algunos casos, esos intercambios son muy extensos. Sin embargo, aclaró que "el papel y la función del jefe del Gobierno y del Estado es que hay momentos en los que debe poder tomar decisiones sin compartir la responsabilidad con nadie y sin consultar a nadie".

Sobre las permanentes exigencias de Azerbaiyán

Para el primer ministro armenio, las exigencias presentadas por Bakú a Armenia obedecerían a dos razones: porque Azerbaiyán quiere llevar el proceso de negociación a un callejón sin salida o porque realmente tiene ciertas preocupaciones.

“Teniendo en cuenta el proceso de negociación y los avances logrados, partimos del supuesto de que Azerbaiyán no quiere llevar deliberadamente el proceso de negociación a un callejón sin salida. Por eso, estamos tratando de disipar las preocupaciones existentes, presentando constantemente nuevas propuestas”, dijo Pashinian.

Sin embargo, el jefe del gobierno armenio subrayó que Ereván también tiene ciertas preocupaciones, pero intenta superarlas. “La Constitución de Azerbaiyán contiene reivindicaciones territoriales contra la República de Armenia. Sin embargo, Ereván, a diferencia de Bakú, no exige cambios en la Constitución, ya que comprende perfectamente que tales exigencias pueden llevar el proceso de negociación a un callejón sin salida. Y no estamos interesados en eso”, enfatizó Pashinian.

Las demandas contra Azerbaiyán en tribunales internacionales

El primer ministro armenio no descartó abandonar las demandas contra Azerbaiyán en los tribunales internacionales.

“Como todavía no hay acuerdo al respecto, ambos estamos haciendo ampliaciones a las demandas ya presentadas. Sin embargo, si abordamos esta cuestión desde un punto de vista de principios, si vemos que estamos logrando una paz real y concluyendo un acuerdo, creo que podemos llegar a un acuerdo y levantar las demandas”, dijo Pashinian.

Según el primer ministro, el acuerdo consiste en no presentar reclamaciones entre sí por hechos ocurridos anteriormente y en negarse mutuamente a presentar nuevas demandas. “Esperemos que en el futuro no haya motivos para hacerlo”, señaló.

La Corte Penal Internacional (CPI) de la ONU está considerando una demanda de Armenia contra Azerbaiyán, presentada el 28 de septiembre de 2023, exigiendo que el país vecino elimine todas las formas de discriminación racial existentes allí, debido a muchos años de propaganda de odio y armenofobia a nivel estatal.

Oficialmente, el gobierno de Pashinian informó que Ereván también espera que Bakú se abstenga de tomar medidas punitivas contra los antiguos dirigentes de Artsaj, actualmente encarcelados en Azerbaiyán. Además, Armenia insiste en lograr detener la demolición y modificación de monumentos del patrimonio cultural armenio en la región, incluidos los monumentos a las víctimas del genocidio armenio en el Imperio Otomano en 1915.

¿Acuerdo estratégico con Azerbaiyán?

El primer ministro armenio explicó qué quiso decir cuando en el Parlamento habló de la necesidad de concluir un “acuerdo estratégico” entre Ereván y Bakú. El 13 de noviembre, en la Asamblea Nacional, Pashinian había dicho que “Armenia y Azerbaiyán, además del acuerdo de paz, deben concluir un acuerdo estratégico sobre la base del principio que planeamos vivir juntos durante los próximos siglos”. Y agregó que este acuerdo estratégico se basa en el concepto de “Armenia real”.

“El acuerdo estratégico significa que Armenia y Azerbaiyán no sólo deben aceptar de jure, sino también de facto y en todos los niveles, que el Azerbaiyán Soviético con su territorio es el actual Azerbaiyán independiente, y que la Armenia Soviética con su territorio es la actual República de Armenia. Deben acordar esta realidad y convivir en paz, para comenzar, lentamente y con mucho cuidado, a reiniciar las relaciones, a abrir las comunicaciones y establecer vínculos económicos”, puntualizó Pashinian.

Respecto al proceso de delimitación y demarcación fronteriza y al funcionamiento de la Comisión conjunta, Pashinian informó que "las comisiones de demarcación han presentado propuestas sobre en qué áreas continuar la demarcación. Armenia ha presentado la suya y durante la próxima reunión se decidirá en qué área continuar la demarcación".

Los cambios en el Poder Judicial

Durante su entrevista en la TV Pública, Nikol Pashinian se refirió a las discusiones sobre la dimisión del presidente del Consejo Judicial Supremo, Karén Andreasian, remarcando que lo sucedido no fue como consecuencia de la presión del poder ejecutivo.

"En primer lugar quiero decir que no hubo ninguna exhortación del primer ministro, sino que fue una petición del primer ministro. Son cosas completamente diferentes. ¿Existe una posibilidad política, moral y jurídica de realizar tal petición? Creo que sí", subrayó Pashinian.

Según él, "si no quisiéramos tener un sistema judicial verdaderamente independiente, muchas cosas se desarrollarían pacíficamente y, en general, no habría disturbios. Sin embargo, hemos elegido el camino difícil, pero necesario. Tener un sistema judicial independiente requiere también cambios sistémicos", enfatizó.